Hablamos con Miguel Monllor, jugador de gran calidad que tuvimos la suerte de disfrutar en El Madrigal los aficionados del Villarreal a mediados de los 80. Con 16 años ya estaba jugando en Segunda B con el Vall de Uxó y luego lo pescó el Real Madrid, pero una lesión truncó su suerte de blanco. Vivió momentos históricos con el submarino, como aquellas eliminatorias de Copa ante Valencia y Real Sociedad o aquel ascenso de 1987. Tras ascender con el Villarreal a Segunda B dejó el equipo por desavenencias con el entrenador (Luiche), un lugar que nos comenta para el “era ideal” por la proyección que mostraba la entidad y porque le cogía muy cerca de Vall de Uxó, donde vivía su familia. Se quedó decepcionado con Luiche, que se quiso deshacer de él nada más llegar al banquillo del Villarreal (cosa que impidió la afición con su presión) y también con Ernesto Girona, del que nos dice que le faltó caracter para defenderlo ante la postura de Luiche…
¿A qué se dedica ahora Miguel Monllor?
Pues, yo me retiré del fútbol en Águilas, un pueblo de la provincia de Murcia y soy Quiromasajista Terapéutico, que es una profesión que siempre, incluso cuando jugaba al fútbol, me llamaba la atención y a eso me dedico.
Empezaste en aquella histórica UDE, debutando en Segunda B con solo 16 años, ¿cierto?
Así es. Empecé en la UDE (Vall de Uxó) con 16 años. Fue una temporada en la que salieron las cosas muy bien y al ser tan joven, en una Segunda B muy fuerte y con un nivel muy alto, al terminar la temporada tuve varias ofertas interesantes, Atlético de Madrid, Sevilla, Español y Real Madrid, al que me fui con un contrato de 3 años.
En el Castilla jugaste en Segunda A y llegaste a compartir once con Butragueño… Cuéntanos algo de aquello.
Lo del Real Madrid fue una pena porque, fui con un contrato de tres años, pero el primer año me pasó de todo: A los dos meses de llegar allí me rompí el brazo por tres sitios, me operaron, estuve de baja, me recuperé, debuté, jugué tres partidos contra Ceuta, Getafe y Rayo Vallecano, iba teniendo continuidad pero me hice una rotura de fibras muy fuerte, una lesión de aproximadamente un mes y medio pero, la trataron mal y tuve tres o cuatro recaídas…en fin, que de los meses de competición estuve 7 de baja. El segundo año me costó y el tercero fue bueno, pero, claro, a la hora de renovar era complicado y seguí otro camino. En cualquier caso, fui compañero de “la quinta del Buitre” con los que aún hoy mantengo buena relación.

¿Como llegaste al Villarreal?
Pues fue durante unas vacaciones, yo tengo la familia en Vall de Uxó, contactaron conmigo Orenga y Pascual Font de mora. Me comentaron la idea que tenían y me pareció muy interesante y no lo dudé un momento. Era un proyecto muy bueno, se estaba haciendo un buen equipo, me comentaron algunos nombres de algunos compañeros y, así fue como llegué al Villarreal.
Cuando llegaste te encontraste con Causanilles de entrenador, todo un filósofo del fútbol, pero a pesar de que aquel año el Villarreal se reforzó con grandes jugadores (como tú) aquello no empezó bien, con el equipo colista en la jornada 5 y llegó Pesudo…
Así es. Estaba Causanilles de entrenador, que había sido compañero mío en el Vall de Uxó antes de irme al Madrid y yo tenía muy buena relación con él. Lo que pasó es que éramos un equipo con muchos jugadores nuevos y al principio costó. Los resultados no acompañaban y ya sabes que, en fútbol, los entrenadores dependen mucho de los resultados y cesaron a Causanilles. En su lugar vino Pesudo, que también me conocía y con quien también tenía buena relación. El equipo empezó a ir a más porque cada vez nos conocíamos mejor y estábamos más conjuntados y fue así que nos clasificamos para la Copa del Rey. A nivel personal fue un buen año.

Terminó la temporada bien y como dices os clasificasteis para esa histórica Copa del Rey y llegó Luiche ¿Que tal con el nuevo entrenador?
Pues de Luiche, la verdad, no tengo un buen recuerdo porque, como he dicho antes, hice una temporada muy buena; no tuve ningún problema físico, ni lesiones, nada y cuando íbamos a jugar el primer partido de pretemporada, un amistoso contra el Segorbe, el presidente, Ernesto Girona, me dijo que Luiche no contaba conmigo y que me buscara equipo. Le dije que bien, que me iba y que me diera la carta de libertad pero cuando el equipo salió a calentar, yo estaba en la grada y los aficionados y los socios, que me querían mucho y así me lo demostraron, cuando vieron que no estaba en la alineación y se corrió la voz de lo que pasaba, empezaron a corear mi nombre y a abuchear a Luiche. Eso hizo que tanto Ernesto como Luiche cambiaran de opinión, al ver que la afición no estaba de acuerdo. Tras esto, igualmente yo quería irme, porque pensaba que en esa situación sería lo mejor, pero me convencieron.
Luego el año fue bueno, en casa jugué siempre, pero fuera jugaba poco, aún viniendo de hacer un buen partido la jornada anterior, así que es por eso que no guardo un buen recuerdo de Luiche, personalmente, aunque sí del año en Villarreal, que fue bueno.
En Copa del Rey metes el histórico gol que forzó la prórroga en los últimos minutos ante el Valencia, la que listaste ahí Monllor…acabaste “enterrado” en una montaña de aficionados que invadieron el campo para celebrarlo…
Pues sí, de ese partido contra el Valencia en la Copa del Rey, no me voy a olvidar nunca. Salió todo como un guión de película. Marcaron ellos primero y en el minuto 86, cuando estábamos ya casi eliminados, tuve la suerte de marcar el gol. En la prórroga, vuelven a marcar ellos, después doy a Honorio el pase para que marque y en la tanda de penaltis también marqué el mío. Recuerdo muy bien la celebración del gol en el córner. Se lanzó un montón de gente, ahí están las imágenes que he visto muchísimas veces. Una alegría enorme y un día inolvidable.
Luego en la siguiente ronda caímos contra aquella histórica Real Sociedad de Arconada…
Nos tocó, la que yo creo, fue la mejor Real Sociedad de la historia, con Arconada, Bakero, Beguiristain…Ellos pusieron prácticamente al equipo titular porque, aunque nosotros éramos un tercera división, veníamos de eliminar a todo un Valencia y no las tenían todas consigo. El partido fue muy igualado pero en un pequeño despiste que tuvimos, López Ufarte, que no había hecho gran cosa hasta ese momento, metió el gol y se llevaron el partido. Recuerdo los últimos minutos porque los tuvimos acorralados, pero aguantaron y no conseguimos marcar. Ese año, de hecho, fueron los campeones de la Copa del Rey así que ganarles era muy complicado, pero casi se pudo…
La temporada 86/87 siempre formará parte de la historia amarilla, será recordada como la del ascenso a Segunda B ¿Como la viviste tú?
La viví con mucha alegría porque, al final, se consiguió el objetivo y en la carrera de un futbolista el ascender de categoría, suele pasar poco.
Tengo un recuerdo muy bonito, sobre todo por la afición, los socios, lo felices que estaban y cómo se celebró…¡fue un momento muy bueno!
¿Por qué no continuó Monllor después de aquel ascenso? El proyecto era ambicioso y buscaba la Segunda A…
Pues no lo hice porque esa temporada me llevé un desengaño muy grande con el presidente Ernesto Girona y el entrenador Luiche, por lo que te he comentado antes, y cuando Ernesto me llamó para hablar de la renovación, y sabiendo yo que era el lugar ideal dónde seguir, pregunté qué iba a pasar con el entrenador y Ernesto me comentó que Luiche iba a continuar. Al saberlo, le dije que me iba. Ni siguiera tratamos el tema económico. Ernesto se quedó extrañado y me preguntó si tenía otro equipo y le dije que en ese momento no, pero que pensaba que no me quedaría sin uno donde jugar. Yo si seguía Luiche, me iba. Ése fue el motivo. Aún sabiendo, como he dicho antes, que era el lugar ideal donde estar; cerca de mi familia y como luego se demostró que el Villarreal iba a ir a más.
Pero, yo me llevé un chasco muy grande con Ernesto y Luiche y pensé que irme era lo mejor, si no deportivamente, por dignidad.
¿Algo más que añadir?
Pues, sobre todo enviar un abrazo enorme a la afición del Villarreal, que siempre me trató muy bien y me demostró su cariño durante las dos temporadas que estuve allí. Lo agradezco de corazón y deseo a todos buena salud y felicidad.
Gracias Miguel Monllor, en Villarreal somos muchos los que te recordamos

Creador de SubmarinoAmarillo.net en 2007. Aficionado del Villarreal CF, coleccionista de crónicas, fotos y vídeos históricos del Submarino Amarillo.