El Villarreal jugó contra el Ath. Bilbao el día de Pascua de 2002 un partido clave para mantener la categoría.
Contexto histórico.
La temporada 2001-02 era la tercera del Villarreal en Primera División. Después de una primera temporada, la 1998-99, en la que se perdió la categoría, el Villarreal volvió rápidamente a Primera y completó una magnífica temporada, la 2000-01, cuando el Villarreal quedó en 7.ª posición, a solo 2 puntos del Celta, que se clasificó para jugar en Europa y con quién perdió un partido decisivo en la penúltima jornada de liga.
A los inicios de la temporada 2001-02 se esperaba que el Villarreal siguiera con la línea de la temporada anterior. El Villarreal estaba haciendo fichajes muy importantes para ser un equipo competitivo en Primera. Si en la temporada anterior habían llegado al Villarreal jugadores como Víctor Fernández o Palermo, en verano de 2001 llegaron Guayre o Galca. El equipo seguía dirigido por Víctor Muñoz que apostaba por un fútbol de combinación, muy agradable de ver por el aficionado.
La temporada empezó muy bien y en la jornada 5 el Villarreal iba en 2.ª posición empatado a 12 puntos con el líder, el Betis, pero poco a poco las cosas irían a peor y el Villarreal acabaría luchando para salvarse. El Villarreal tuvo un par de rachas muy malas a lo largo de la temporada.
La primera, empezó en la jornada 15 y duró hasta la jornada 21. En la jornada 14 el Villarreal le ganó 1-0 al Alavés y después de este partido, entre semana, el Villarreal jugaba en campo del Levante en eliminatoria de Copa a partido único. En aquel partido Martín Palermo se lesionó de gravedad después de marcar un gol cuando lo celebró con un grupo de aficionados porque un trozo de grada se rompió y se cayó encima de él. El Villarreal estuvo 7 partidos sin ganar, con 3 empates y 4 derrotas. Finalmente, el 27-1-2002, en la jornada 22, el Villarreal derrotó por 2-1 al Tenerife. Si después de ganarle al Alavés en la jornada 14 el Villarreal estaba en el lugar 9 de la clasificación, 6 puntos ante el descenso y a solo 2 de Europa, después de la jornada 22, el Villarreal estaba en el lugar 14 a solo 2 puntos del descenso y a 9 puntos de Europa. El equipo no encontraba el juego brillante de la temporada anterior, aunque hizo una buena Copa y se consiguió llegar por segunda vez en la historia a 1/4 de final, donde el Ath. Bilbao eliminó al Villarreal con facilidad ganando 0-2 en El Madrigal y empatando 1-1 en San Mamés.
La segunda mala racha empezó muy poco después de la primera. El Villarreal ganó 2-1 al Mallorca en liga el 6-2-2002 y después estuvo 7 partidos sin ganar, con 4 empates y 3 derrotas. Así que después de la jornada 31, justo antes de jugar en casa contra el Ath. Bilbao, el Villarreal estaba en la posición 16 a solo 1 punto del descenso. Desde la lesión de Martín Palermo, el Villarreal había jugado 17 partidos de liga, con 2 victorias, 8 empates y 7 derrotas. El equipo había pasado de pensar en disputar plaza UEFA a luchar para salvar la categoría. El partido contra el Ath. Bilbao iba a ser decisivo.
La lesión de Martín Palermo no fue la única razón del bajo rendimiento del equipo. Por un lado, se tiene que destacar que Diego Cagna no estuvo al nivel de la temporada anterior y era un jugador clave. Tampoco funcionó el fichaje de Galca, que estaba llamado a ser el jugador importante en el centro del campo del Villarreal. Y Víctor, quién había sido la sensación la temporada anterior, también bajó su nivel. Por su parte, Guayre, uno de los jugadores revelación en Las Palmas en la temporada 2000-01 tampoco rendía. El entrenador Víctor Muñoz no daba con la tecla para hacer jugar al equipo como la temporada anterior.
Previa del partido.
Martín Palermo empezó a entrenar con el equipo la semana previa al partido contra el Ath. Bilbao, pero todavía no era posible alinearlo en aquel partido. Para sustituir a Palermo se contrató en el mercado de invierno a Pizzi, pero su rendimiento no estaba siendo nada bueno y solo había marcado 1 gol en la victoria 2-1 ante el Tenerife.
Víctor Muñoz, después de los malos resultados del equipo, empezaba a estar cuestionado por parte de la afición. Se especulaba que su lugar podía empezar a estar en peligro si no llegaban buenos resultados pronto.
El Ath. Bilbao venía con muchas bajas a Villarreal. No podía jugar por sanción Tiko, jugador que había marcado los 2 goles de su equipo en el partido de Copa en El Madrigal. Además, también eran baja Guerrero, Yeste, Lacruz y Joseba Etxebarria.
El Ath. Bilbao era el mejor equipo fuera de casa de toda la liga hasta aquel momento. Llevaba 3 partidos empatados y 7 ganados de los 15 partidos que había jugado fuera, aunque venía de una derrrota muy dolorosa en casa, ya que había perdido 1-6 ante el Celta. Heynckes, entrenador del Ath. Bilbao, dijo que tenían que jugar con la ansiedad del Villarreal y esto les podría permitir ganar.
El Ath. Bilbao había jugado 5 partidos en El Madrigal, 4 oficiales y 1 amistoso. Había ganado 4 partidos, 2 de Copa (0-1 en la 1996-97 y 0-2 en la 2001-02), 1 de liga (0-1 en la 2000-01) y 1 amistoso (1-2 en el Trofeo Porcelanosa de la 1996-97). Había empatado 0-0 en la temporada 2001-02. El Ath. Bilbao no había encajado ningún gol en partido oficial ante el Villarreal y solo había recibido 1 gol en un partido amistoso, marcado por Salillas.
Ficha técnica.
Villarreal 5-Ath. Bilbao 2.
El Madrigal, 31-3-2002, Domingo de Pascua. 13.000 espectadores.
Villarreal: López Vallejo, Xavi Roca, Ballesteros, Quique Álvarez, Arruabarrena, Amor, Galca, Guayre, Calleja, Víctor, Jorge López.
Cambios: Cagna por Calleja en el minuto 65, Pizzi por Jorge López en el minuto 77, Gracia por Víctor en el minuto 80.
Ath. Bilbao: Lafuente, Carlos García, Oskar Vales, Del Horno, Larrazábal, Gurpegui, Alkiza, Orbaiz, Javi González, Ezquerro, Urzáiz.
Cambios: Murillo por Javi González en el minuto 45, Aitor Ocio por Del Horno en el minuto 45, Karanka por Ezquerro en el minuto 63.
Árbitro: Turienzo Álvarez. Mostró tarjeta amarilla a Ballesteros del Villarreal y a De el Horno, Larrazábal, Murillo y Aitor Ocio del Ath. Bilbao.
Goles.
1-0. Minuto 7. Víctor.
2-0. Minuto 12. Quique Álvarez.
3-0. Minuto 17. Jorge López.
4-0. Minuto 32. Víctor.
5-0. Minuto 41. Guayre.
5-1. Minuto 64. Carlos García.
5-2. Minuto 88. Urzáiz, de penalti.

Desarrollo del partido.
De entrada el Villarreal introdujo en la alineación una importante novedad. Pizzi, el delantero centro de referencia, se quedó en el banquillo y actuó Jorge López como falso 9. El Villarreal empezó con muy buenas combinaciones entre Víctor, Guayre, Jorge López y Calleja, hecho que supuso constantes llegadas al área del Ath. Bilbao. Además, rápidamente llegaron los goles. El primero de Víctor, después Quique Álvarez marcaría tras el saque de un córner. En el minuto 17 el partido estaba prácticamente sentenciado, cuando Jorge López acabó rematando un córner lanzado por Víctor El buen juego siguió a lo largo de toda la primera parte y fruto de esto vendrían dos goles más, marcados por Víctor y Guayre. Mención especial, dentro del magnífico funcionamiento de todo el equipo para Víctor, quién recuperó el nivel de la temporada anterior, y de la pareja de mediocentros formada por Amor y Galca, que funcionaron a nivel defensivo y ofensivo como no lo habían hecho hasta aquel momento.
La segunda parte fue un simple trámite y el Ath. Bilbao maquilló el marcador, pero el trabajo estaba hecho y el público del Madrigal pudo vivir una festiva tarde de Pascua.
Postpartido
Víctor, el delantero del Villarreal, dijo que le hubiera dado igual ganar por un gol, que la victoria era muy importante y se había conseguido.
En la misma línea estuvo Jorge López, quién destacó que el partido les tenía que servir para coger moral. Además, reconocía que nunca había jugado de punta. Sí algunas veces de segunda punta.
Por su parte, el entrenador Víctor Muñoz dijo que se merecían un partido así porque en muchos partidos creaban oportunidades y no entraban.
Heynckes dijo que la clave del partido fue que el Villarreal les marcó 3 goles en los primeros 15 minutos y que cometieron demasiado errores detrás, igual que en el partido del Celta.
El partido contra el Ath. Bilbao fue un gran paso para el Villarreal, pero todavía no fue el paso definitivo. Todavía esperaban grandes partidos aquella temporada, especialmente destacable la victoria 2-1 en El Madrigal, el día que Martín Palermo volvió a jugar.